¿Que me importa que seas sabia?
¡Sé bella y sé triste! Los lloros
añaden un encanto al rostro,
como el río al paisaje;
la lluvia rejuvenece a las flores.
Te amo sobre todo cuando la alegría
de tu frente abatida huye;
cuando tu corazón en el horror se ahoga;
cuando sobre tu presente se despliega
la horrible nube del pasado.
Te amo cuando tus grandes ojos vierten
un agua cálida como la sangre;
cuando, a pesar de que mi mano te acune,
tu angustia, demasiado densa, perfora
como un estertor de moribundo
Aspiro, deleite divino,
himno profundo, delicioso,
todos los gemidos de tu pecho,
y creo que tu corazón se ilumina
con las perlas vertidas de tus ojos.
II
Sé que tu corazón, que rebosa
viejos amores sin raíz ,
llamea aún como una fragua,
y que abrigas bajo tu pecho
el orgullo del condenado;
pero, querida mía, hasta que tus sueños
el Infierno no hayan reflejado,
y hasta que en una pesadilla sin treguas,
soñando venenos y espadas,
de hieroo y de pólvora enamorada,
no abriendo a nadie más que con temor,
viendo la desgracia por todas partes,
convulsa cuando suene la hora,
y no hayas sentido aún el abrazo
del Tedio irresistible,
no podrás, esclava y reina ,
que solo me amas con espanto,
en el horror de la noche malsana
decirme con el alma llena de gritos:
Soy igual que tú, tú eres mi Rey"
Charles Baudelaire
"Nuevas Flores del Mal"
Uno de los poemas de Baudelaire que más me llega, me encanta el sentimiento romanticista que rodea a todo el poema, esa rebeldía como presenta como algo bello algo que muchos podrían considerar como molesto. Un poema lleno de dolor, poca esperanza, pero muy sincero y bastante real. Con ese drama que uno puede esperar del maestro Baudelaire, por ahora mi poeta favorito.